Chancay, Huaral, Lima, Perú.
(09/12/2016) Hubo un tiempo, en la historia del Perú en el que vivimos encarnizadamente las consecuencias de la falta de identidad nacional que se percibe hasta hoy en día en nuestro país; este período fue la Guerra del Pacífico (1879-1983); muerte, caos, saqueos incendios, etc, fueron algunas de las eternas cicatrices que nos dejaron aquellos años, sin embargo, los mártires caídos durante esa etapa se alzaron nuevamente como perpetuos héroes nacionales; las batallas emprendidas en cada pueblo peruano que se alzó en armas para detener al invasor, quedaron como episodios de lucha, coraje, valor y entrega y son estos, los que persisten hasta hoy en día como fieles retratos de, un también eterno, orgullo nacional.
Creo que ya lo había mencionado, pero antes de viajar hacia algún punto me gusta conocer la historia de dicho punto, y Chancay es una ciudad que revalora muchísimo su participación histórica en la historia del Perú pues ostenta ser cuna de la Cultura Chancay y participar activamente en el hundimiento de la Goleta Chilena "Covadonga". De todas maneras, no solo valía la pena, sino que ERA NECESARIO conocerlo.
El plan inicial era ir para visitar exclusivamente el Castillo de Chancay, una construcción del S. XX que se conserva hasta el día de hoy en las costas de Chancay, sin embargo regresamos con mucho mas que eso. Averiguamos pasaje a Chancay y la entrada al castillo y salimos a las 7 am, en dirección al terminal de buses de Zbuss (Cruce calle Loreto con Av. Abancay, cerca al paradero Acho en el Rímac), el pasaje cuesta aproximadamente S/7.00 (de Lunes a Viernes).
El viaje dura aproximadamente 2 horas, pasando por todos los distritos aledaños a la panamericana norte y durante todo el camino puede apreciarse la desértica costa limeña, desde Ancón hasta el serpentín de Pasamayo, autopista bastante conocida debido a que hace mas de 30 años era escenario de múltiples accidentes vehiculares debido a la poca iluminación, el mal estado de la carretera y la densa neblina nocturna de la zona en aquel entonces.
Al llegar bajamos y buscamos algún mototaxi (S/ 1.00 c/u) para que nos transporte hacia la entrada del castillo, recorrimos por algunas callecitas y finalmente llegamos hasta la entrada del Castillo de Chancay.
El ingreso cuesta S/15.00 de Lunes a Viernes y lo primero a la vista es el fondo, un amplio y largo jardín decorado con algunas esculturas, sobre este punto tenía especial interés por observar, pues había leído en muchas páginas, comentarios de personas diciendo que el castillo estaba demasiado descontextualizado para lo que fue su primera función: Una casa (bastante excéntrica) y que además, las visitas ya no eran tanto de tinte revalorativo histórico, sino que mas parecía una feria de productos, alimentos y servicios a lo largo de todo el recorrido, en el que se habían mezclado papas con camotes y el castillo había perdido su esencia cultural, así que bueno, era hora de comprobarlo.
Las esculturas a lo largo del camino del jardín, efectivamente, están demasiado descontextaulizadas, hay leones, soldados romanos, dioses griegos y hasta un buda; al llegar al castillo fuimos hacia alguna oficina para poder iniciar el recorrido turístico, que consistía en la visita a 4 espacios en los que pueden encontrarse (AL FIN) vestigios de los primeros dueños (Consuelo Amat y León y Rómulo Boggio Klauer), fotos de la historia del castillo, restos culturales de diversas culturas del Perú, mas estatuas euroasiaticas y un salón en el que se encuentran animales disecados a tamaño real ¿? y un mirador, llamado "Covadonga", frente al que se encuentran sumergidos los restos de la mencionada Goleta Chilena; el recorrido dura aproximadamente 2 horas y lo interesante es ver la galería de fotos de la construcción del castillo, de cómo después de 30 años de abandono, el castillo ha sido recuperado y puesto en servicio como punto turístico; y además la historia del hundimiento del buque chileno apenas a 500 metros del castillo 50 años antes de su construcción. Luego del recorrido, fuimos a la parte posterior nuevamente, volvimos al mirador y bajamos hacia las terrazas que se encuentran a la derecha, habíamos llevado almuerzo y aprovechamos en comer en este punto, en el que existen mesitas pues estas terrazas son nuevas construcciones, sobre las que se ha montado un parque acuático y un restaurante (por ello las mesas); por suerte ese día no estaba en funcionamiento el parque acuático, porque según comentaban algunas personas vía web, cuando ese parque está en funcionamiento, no se puede ni caminar por el castillo. Ese nuevo espacio me dejó con la sensación de que efectivamente, se está sobreexplotando el potencial turístico del castillo y que se pretende acoplar todo lo que está considerado como un espacio recreativo en la infraestructura del castillo, de igual manera, el mirador es una anexión posterior al castillo, pues en la construcción original no existía aquel mirador. Al retornar hacia la parte delantera del castillo observamos que a lo lejos, en la misma terraza trasera se estaba iniciando la construcción de otra piscina mas, en ese momento pensé -Vaya suerte de llegar cuando todo esta cerrado- Pues realmente tuvimos mucha suerte, no había mucha gente en el castillo ese día, compramos un vino (S/10.00), unas cuantas fotos y salimos del castillo con dirección a la playa aledaña (Chorrillos).
A las 3 pm aproximadamente llegamos a la playa Chorrillos, la misma que según algunas fuentes, suele estar contaminada, sobretodo en la época de verano, pero no fue nuestro caso, dicha playa estaba limpia y hasta había un par de pescadores artesanales adentrándose a pocos metros para sacar algunos pescados, fue un buen rato para descansar y observar el legendario Mar de Grau. Estuvimos en la playa aproximadamente 30 minutos, salimos caminando de ahí hasta llegar a la autopista y tomamos, nuevamente, una moto que nos lleve hasta la Plaza de Chancay (S/.1.00).
Tiene una muy bonita plaza, bastante ornamentada con vegetación y destacan, entre lo mas resaltante, dos anclas cruzadas entre sí que simulan un arco, dichas anclas pertenecían a la Goleta Covadonga y Chancay guarda todos su restos como trofeos valiosos de aquel período; destaca también en el centro de la plaza una pequeña caseta bastante colorida que sirve como punto de descanso para los vecinos y/o visitantes.
Frente a la plaza funciona la Municipalidad de Chancay y al lado de esta, el Museo Municipal de Chancay (S/. 3.00 de entrada), en sus interiores alberga algunos vestigios de la Cultura Chancay (1200 y 1470 D.C.) desde la muy conocida estatuilla Cuchimilco hasta recreaciones de entierros Chancay, todo esto en el sótano, en el segundo y el tercer piso se encuentran vestigios históricos de la ciudad, así como restos de la tan mencionada en este post: Goleta Covadonga, hundida en 1880 a 500 metros de la playa Chorrillos. la historia cuenta que un elegante bote se encontraba naufragando cerca a la playa, este bote estaba cargadísimo de explosivos, el capitán de la Covadonga decidió cargarlo en la goleta, pero cuando era subido, el bote estalló y provocó el rápido hundimiento de la nave, años después, buzos peruanos y chilenos se han sumergido para recuperar algunas piezas, en el museo de Chancay se conservan algunas piezas recuperadas, como el medallón de la Covadonga, un medallón que la goleta recibió como reconocimiento tras el hundimiento de la Fragata Independencia y la masacre de su tripulación frente a las costas de Iquique, en 1879 (vale mencionar que la Covadonga no hundió a la Independencia, sino que esta última encalló en las rocas de las costas de Punta Gruesa, en Iquique y producto de esto, la Fragata se hundió), también tiene un modelo a escala de la goleta chilena.
Al finalizar el recorrido del museo (aprox 4.30 pm), salimos hacia la plaza y decidimos caminar hasta el paradero de buses que nos llevarían a Lima (Ovalo de Chancay), desde ahí pasan buses cada 5 minutos aproximadamente, subimos a uno de la empresa Turismo Barranca y nos cobró S/.5.00 hasta el Terminal de Buses de Plaza Norte. Y para ponerle la cereza al pastel, pasamos por el Serpentín de Pasamayo ante la mirada del veniente y próspero ocaso de las playas del norte de Lima.
Frente a las costas de Chancay se hundió a la Covadonga |
El litoral Chancayano
El plan inicial era ir para visitar exclusivamente el Castillo de Chancay, una construcción del S. XX que se conserva hasta el día de hoy en las costas de Chancay, sin embargo regresamos con mucho mas que eso. Averiguamos pasaje a Chancay y la entrada al castillo y salimos a las 7 am, en dirección al terminal de buses de Zbuss (Cruce calle Loreto con Av. Abancay, cerca al paradero Acho en el Rímac), el pasaje cuesta aproximadamente S/7.00 (de Lunes a Viernes).
El viaje dura aproximadamente 2 horas, pasando por todos los distritos aledaños a la panamericana norte y durante todo el camino puede apreciarse la desértica costa limeña, desde Ancón hasta el serpentín de Pasamayo, autopista bastante conocida debido a que hace mas de 30 años era escenario de múltiples accidentes vehiculares debido a la poca iluminación, el mal estado de la carretera y la densa neblina nocturna de la zona en aquel entonces.
Al llegar bajamos y buscamos algún mototaxi (S/ 1.00 c/u) para que nos transporte hacia la entrada del castillo, recorrimos por algunas callecitas y finalmente llegamos hasta la entrada del Castillo de Chancay.
El ingreso cuesta S/15.00 de Lunes a Viernes y lo primero a la vista es el fondo, un amplio y largo jardín decorado con algunas esculturas, sobre este punto tenía especial interés por observar, pues había leído en muchas páginas, comentarios de personas diciendo que el castillo estaba demasiado descontextualizado para lo que fue su primera función: Una casa (bastante excéntrica) y que además, las visitas ya no eran tanto de tinte revalorativo histórico, sino que mas parecía una feria de productos, alimentos y servicios a lo largo de todo el recorrido, en el que se habían mezclado papas con camotes y el castillo había perdido su esencia cultural, así que bueno, era hora de comprobarlo.
Las esculturas a lo largo del camino del jardín, efectivamente, están demasiado descontextaulizadas, hay leones, soldados romanos, dioses griegos y hasta un buda; al llegar al castillo fuimos hacia alguna oficina para poder iniciar el recorrido turístico, que consistía en la visita a 4 espacios en los que pueden encontrarse (AL FIN) vestigios de los primeros dueños (Consuelo Amat y León y Rómulo Boggio Klauer), fotos de la historia del castillo, restos culturales de diversas culturas del Perú, mas estatuas euroasiaticas y un salón en el que se encuentran animales disecados a tamaño real ¿? y un mirador, llamado "Covadonga", frente al que se encuentran sumergidos los restos de la mencionada Goleta Chilena; el recorrido dura aproximadamente 2 horas y lo interesante es ver la galería de fotos de la construcción del castillo, de cómo después de 30 años de abandono, el castillo ha sido recuperado y puesto en servicio como punto turístico; y además la historia del hundimiento del buque chileno apenas a 500 metros del castillo 50 años antes de su construcción. Luego del recorrido, fuimos a la parte posterior nuevamente, volvimos al mirador y bajamos hacia las terrazas que se encuentran a la derecha, habíamos llevado almuerzo y aprovechamos en comer en este punto, en el que existen mesitas pues estas terrazas son nuevas construcciones, sobre las que se ha montado un parque acuático y un restaurante (por ello las mesas); por suerte ese día no estaba en funcionamiento el parque acuático, porque según comentaban algunas personas vía web, cuando ese parque está en funcionamiento, no se puede ni caminar por el castillo. Ese nuevo espacio me dejó con la sensación de que efectivamente, se está sobreexplotando el potencial turístico del castillo y que se pretende acoplar todo lo que está considerado como un espacio recreativo en la infraestructura del castillo, de igual manera, el mirador es una anexión posterior al castillo, pues en la construcción original no existía aquel mirador. Al retornar hacia la parte delantera del castillo observamos que a lo lejos, en la misma terraza trasera se estaba iniciando la construcción de otra piscina mas, en ese momento pensé -Vaya suerte de llegar cuando todo esta cerrado- Pues realmente tuvimos mucha suerte, no había mucha gente en el castillo ese día, compramos un vino (S/10.00), unas cuantas fotos y salimos del castillo con dirección a la playa aledaña (Chorrillos).
¿? |
Parte posterior del Castillo de Chancay |
Jardines, fachada del castillo y yo :v |
A las 3 pm aproximadamente llegamos a la playa Chorrillos, la misma que según algunas fuentes, suele estar contaminada, sobretodo en la época de verano, pero no fue nuestro caso, dicha playa estaba limpia y hasta había un par de pescadores artesanales adentrándose a pocos metros para sacar algunos pescados, fue un buen rato para descansar y observar el legendario Mar de Grau. Estuvimos en la playa aproximadamente 30 minutos, salimos caminando de ahí hasta llegar a la autopista y tomamos, nuevamente, una moto que nos lleve hasta la Plaza de Chancay (S/.1.00).
Tiene una muy bonita plaza, bastante ornamentada con vegetación y destacan, entre lo mas resaltante, dos anclas cruzadas entre sí que simulan un arco, dichas anclas pertenecían a la Goleta Covadonga y Chancay guarda todos su restos como trofeos valiosos de aquel período; destaca también en el centro de la plaza una pequeña caseta bastante colorida que sirve como punto de descanso para los vecinos y/o visitantes.
Frente a la plaza funciona la Municipalidad de Chancay y al lado de esta, el Museo Municipal de Chancay (S/. 3.00 de entrada), en sus interiores alberga algunos vestigios de la Cultura Chancay (1200 y 1470 D.C.) desde la muy conocida estatuilla Cuchimilco hasta recreaciones de entierros Chancay, todo esto en el sótano, en el segundo y el tercer piso se encuentran vestigios históricos de la ciudad, así como restos de la tan mencionada en este post: Goleta Covadonga, hundida en 1880 a 500 metros de la playa Chorrillos. la historia cuenta que un elegante bote se encontraba naufragando cerca a la playa, este bote estaba cargadísimo de explosivos, el capitán de la Covadonga decidió cargarlo en la goleta, pero cuando era subido, el bote estalló y provocó el rápido hundimiento de la nave, años después, buzos peruanos y chilenos se han sumergido para recuperar algunas piezas, en el museo de Chancay se conservan algunas piezas recuperadas, como el medallón de la Covadonga, un medallón que la goleta recibió como reconocimiento tras el hundimiento de la Fragata Independencia y la masacre de su tripulación frente a las costas de Iquique, en 1879 (vale mencionar que la Covadonga no hundió a la Independencia, sino que esta última encalló en las rocas de las costas de Punta Gruesa, en Iquique y producto de esto, la Fragata se hundió), también tiene un modelo a escala de la goleta chilena.
Entierro de la Cultura Chancay. |
Modelo a escala de la Goleta Covadonga |
Medallón de la Goleta Covadonga |
Al finalizar el recorrido del museo (aprox 4.30 pm), salimos hacia la plaza y decidimos caminar hasta el paradero de buses que nos llevarían a Lima (Ovalo de Chancay), desde ahí pasan buses cada 5 minutos aproximadamente, subimos a uno de la empresa Turismo Barranca y nos cobró S/.5.00 hasta el Terminal de Buses de Plaza Norte. Y para ponerle la cereza al pastel, pasamos por el Serpentín de Pasamayo ante la mirada del veniente y próspero ocaso de las playas del norte de Lima.
Serpentín de Pasamayo (N-S) |
Gastos:
Lima-Chancay-Lima: S/. 12.00 (c/u)
Mototaxi: S/. 2.00 (c/u)
Entrada al Castillo de Chancay: S/. 15.00 (c/u)
Entrada al Museo Municipal: S/. 3.00 (c/u)
Entrada al Castillo de Chancay: S/. 15.00 (c/u)
Entrada al Museo Municipal: S/. 3.00 (c/u)
Otros (Cigarrillos, galletas, etc): S/. 2.00
Total: S/. 34.00
Total: S/. 34.00